Nuestra capacidad de asombro parece no tener límite con esta empresa, cuando creemos que han llegado a una cota de despotismo insuperable, ellos, por no hacernos un feo, se esfuerzan y la superan. 

Entendemos que para unos directivos que están acostumbrados al servilismo, a las horas extra no remuneradas, a pedir más cantidad y calidad por la misma mierda de salario, entendemos que para alguien así diferenciar la vida personal de la profesional es complicado, ¿por qué si no se creen en la potestad de llamarnos para preguntar el motivo de nuestra baja y la estimación de su duración?

En un ejercicio educativo, que ya quisieran en Barrio Sésamo, hemos considerado necesario comentaros que cualquier anexo a vuestro contrato, por ampliación de horas o por el motivo que sea, no es un documento personal sino profesional.

Suena a perogrullo, lo sabemos, pero es que el colmo ha sido que se exija al personal que suban a Administración para firmarlos en su tiempo de descanso. Así que si así os lo venden les podéis decir con la voz de Coco: Un contrato es un documento profesional. 

Y pedid que os den un aux que corra de su cuenta que ya pagamos nosotros bastantes rondas.